Miss Universo Costa Rica Mahyla Roth

Desde que tengo memoria, me encantan los concursos de belleza. De hecho, participé en mi primer certamen a los ocho años, que en ese momento se llamaba Miss Niños. Entonces fue muy curioso porque incluso viajaba desde la costa hasta la capital para ir todos los fines de semana a participar en este concurso.

Y a partir de ese momento tuve muy claro que algún día quería ser Miss Universe Costa Rica, que quería representar a Costa Rica ante el universo y ojalá pudiera hacerlo destacar. Entonces, desde ese momento de niña comenzó ese sueño, pero a medida que fui creciendo fue tomando forma y también comencé a darme cuenta de la gran responsabilidad de ser reina, porque no es simplemente ser una cara bonita, sino la voz de una organización.

Entonces comenzó mi preparación en todo lo que se requiere y conlleva ser reina. Y ahorita con Miss Universe Costa Rica también es una preparación para Tailandia, que es un poco diferente, porque ya es un estadio mundial, o sea, ya no es esa zona que tiene Costa Rica, sino que represento a todos los costarricenses, que son sumamente trabajadores, valientes, honestos y dispuestos a ayudar a otras personas.

De hecho, un tema que trato dentro de mi proyecto social, llamado Working Together, es la importancia de la salud mental en la percepción de nuestro cuerpo. Y a veces, cuando hablamos de salud mental, podemos tender a pensar que es sólo la mente, es decir, cómo nos sentimos, si nos sentimos tristes, si nos sentimos felices, pero implica mucho más que eso.

Es decir, cómo nos percibimos a nosotros mismos, cómo tratamos nuestro cuerpo, cómo nos vemos frente a un espejo, las afirmaciones positivas o las cosas negativas que nos decimos tienen una gran influencia en nosotros. Y eso es exactamente lo que me pasó a mí. Durante mi adolescencia tuve un episodio donde tenía un poco de sobrepeso y fue muy difícil porque me comparaba en Instagram con chicas con cuerpos perfectos, que es algo que luego entendí que no hay nada perfecto.

Es decir, cada uno de nosotros es diferente y eso es precisamente lo que nos hace únicos y especiales. Pero es cuando comencé a trabajar mi salud mental, a trabajar mi autoestima, a verme frente a un espejo y decir: amo cada parte de mi cuerpo, lo respeto y que los procesos también sean diferentes, y no compararnos con nadie es clave en esto.

Y otra cosa que considero clave es que la gente no opine sobre el cuerpo de otras personas. Eso es fundamental, porque no sabemos qué situación puede estar pasando esa persona y si tiene un poco de sobrepeso. Por otro lado quizás esté intentando ganar un poco de peso, pero dependiendo quizás de alguna situación hormonal o que no lo permita, podemos afectar mucho la salud mental de esa persona con ese tipo de comentarios.

No, al contrario. Más bien, siempre participé mucho en las actividades de mi escuela en ese momento, así que era más bien muy popular. No todos sabían quién era yo. Entonces, lo que tuve fue más bien una batalla interna.

En la mañana corrí 14 kilómetros, en la tarde fui a hacer ejercicio y no vi los cambios, porque para mí fue como una competencia conmigo misma para intentar parecerme a esas imágenes que descargo en las redes sociales y lo único que tuve que cambiar fue mi chip de que mi proceso es diferente y que no tengo que compararme con nadie.

Pero no, no sufrí acoso. Pero sí sé que muchas personas lamentablemente sí sufren bullying por eso, como te comentaba, porque a veces tienen un poco de sobrepeso o, por otro lado, quizás tienen bajo peso. Y es muy lamentable. Siempre digo que la empatía es lo más importante que podemos practicar, ponernos en el lugar del otro, cómo nos amaríamos si fuéramos nosotros los que recibiéramos ese tipo de comentarios. Entonces, eso también nos ayuda a analizarnos y pensar dos veces antes de lo que vamos a decir.

Sí, como dices, durante la adolescencia hay muchos cambios, es una transición entre la niñez y la vida adulta, entonces todo es muy confuso. Pero gracias a Dios siempre tuve el apoyo de mis padres, ellos siempre han estado ahí apoyándome, siempre me decían, más bien eran mis padres, recuerdo que siempre me decían: ‘Mahyla, no te obsesiones con eso’. Hay un poco de gordura de bebé que, de hecho, cuando te haces adulto, desaparece y te lo vas a perder.’ Y fue entonces, después de tantas veces, que me dijeron como: ‘No, o sea, disfruta tu adolescencia, esto va a pasar en algún momento y luego te puedes concentrar en eso’. “Hacer ejercicio está bien, comer sano está bien, pero no te obsesiones con el peso ni con tu apariencia”.

Y fue increíble porque esas palabras fueron sumamente sabias y acertadas en ese momento. Seguí el consejo y todo cambió. Entonces, a partir de ahí me di cuenta de la importancia de darme consejos positivos.

De las imágenes que tenía las había borrado para decir: ‘No, no me voy a comparar. Si voy a tener mi proceso, lo haré diferente”. Y fue como magia. Empecé a perder peso. Y para mí es muy importante compartir esta historia, porque hay muchas personas que están pasando por algo similar y si puedo ayudar, aunque sea una sola persona que se sienta motivada o inspirada por mi historia, ya he cumplido mi objetivo.

Y una vez que compartí ese video, hubo mucha gente que me escribió: ‘Mahyla, me identifico con tu historia’, ‘Mahyla, comencé a hacer ejercicio’, ‘Mahyla, pensé que era solo a mí a quien me pasó esto’. Y gente de todas las edades. Entonces, siento que con una plataforma como esta se pueden exponer temas que generen empatía entre nosotros.

Eso sí, la familia, como bien dices, ha sido clave y de su parte también. Quiero decir, es mi familia, tenemos un perro y todo. Y ha sido muy lindo porque desde que empezó el concurso ya teníamos planeadas ciertas estrategias para cuando yo iba a participar en Miss Universe Costa Rica, lo que íbamos a hacer, él me acompañaba a las clases de pasarela.

En Costa Rica hay algo que se llama máscaras, que son gigantes. Entonces me mandó a hacer uno con mi cara. Entonces, fue muy curioso porque esa fue la sorpresa número uno, pero la sorpresa número dos fue cuando gané, le pedí que hiciera la corona exactamente como esta con la banda. Entonces, siento que eso es muy importante, tener gente especial en este proceso es aún más motivador y además te ayuda a sacar tu mejor versión.

Para mí la belleza es algo que va más allá de la belleza física o de ciertos prototipos que se definen dentro de la sociedad.

La belleza es como una celebración de la diversidad que existe en esa y en Miss Universo, una celebración de esa diversidad, porque todos somos sumamente diferentes y eso es precisamente lo que nos hace únicos y especiales. Siento que más bien debemos ver la belleza como esa belleza que nace desde dentro y desde esa luz que ilumina a cada una de las personas que nos rodean y esa autenticidad que nos hace a cada uno de nosotros únicos e irrepetibles.