Rey Federico y reina maría están en una visita de estado a Letonia, el primero de los tres países bálticos que visitarán para fortalecer y resaltar los lazos históricos y diplomáticos que comenzaron en 1921. Dinamarca nunca reconoció la anexión soviética de estas naciones, y en agosto de 1991 estuvo entre los primeros países en restablecer relaciones.
La histórica visita comenzó este martes con una recepción oficial y ceremonia de bienvenida en castillo de riga, una fortaleza histórica a orillas del río Daugava en el centro de la capital letona, construido en 1330 por la Orden de la Espada. Para esta primera aparición, la reina María eligió un vestido azul oscuro de manga larga, escote en pico y cintura entallada. Completó su look con un tocado estilo tiara de red y joyas históricas de más de 200 años.
Se trata de unos pendientes y un broche del conjunto Perle-poire, que pertenece al fondo de la familia real danesa. El conjunto incluye una tiara, un collar, aretes y dos broches, uno grande y otro pequeño, con impresionantes perlas. El broche que María usó en esta ocasión fue hecho en 1820 para la boda de la princesa Luisa de Prusia y el príncipe Federico de los Países Bajos en 1825. Los aretes de oro blanco se elaboraron a partir de dos de los cinco colgantes originales del collar, cada uno con una perla grande enmarcada por una guirnalda de diamantes y una perla colgante engastada con diamantes.
Durante este primer encuentro, Rey Federico X fue premiado la Gran Cruz de la Orden de la Cruz del Reconocimientoel honor militar más prestigioso de Letonia, mientras que la reina María recibió la Gran Cruz de la Orden de las Tres Estrellas, que el Rey había recibido anteriormente en 1997. A su vez, el monarca danés nombró al presidente letón Edgars Rinkēvičs Caballero de la Orden del Elefante.
Poco después, el rey Federico y la reina María visitaron el Monumento a la Libertad, donde depositaron una ofrenda floral y se mostraron visiblemente conmovidos. De allí se dirigieron al Parlamento letón, el Saeima, donde también almorzaron. Estos primeros compromisos le dieron al monarca y a su esposa la oportunidad de conectarse con el público, ya que muchas personas se reunieron para saludarlos y ofrecerle ramos de flores a la Reina María.
Después de recorrer el parlamento, Primera Ministra Evika Siliņa dio la bienvenida a la pareja real en el edificio del Gabinete de Ministros, donde se encuentran su oficina y salas de reuniones. Lo siguiente en su agenda es una visita al Museo de la Ocupación, ubicado en el corazón de Riga, que cuenta la historia de Letonia bajo el dominio soviético y alemán entre 1940 y 1991. El día continuará con una visita a la Academia Letona de Cultura y un paseo por el distrito Art Nouveau de Riga, antes de un banquete estatal en el Castillo de Riga a las siete de la tarde.
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