Los Yankees de Nueva York consiguieron su objetivo de regresar a la Serie Mundial y aunque varios de sus jugadores dicen que no se conforman y van por más, pase lo que pase en la gerencia ya piensan en el siguiente paso: la temporada de 2025 de MLB.
Una vez termine la Serie Mundial y se abra el mercado de invierno en Grandes Ligas, en el Bronx tendrán muchas tareas pendientes, porque varios de sus jugadores pueden ir a la agencia libre.
Lo primero que deben tener en cuenta es la opción que tiene Gerrit Cole de salirse de su contrato. Perder al as de su rotación es un lujo que los neoyorquinos no pueden darse, por lo que si el derecho asoma la posibilidad, tendrán que usar la carta que tienen y ejecutar la cláusula para agregar un año más al pacto por $36 millones.
Es muy posible que Cole se quede, pero en otros casos no será tan sencillo de resolver la permanencia. Por ejemplo, con Juan Soto, que acaba de darles el pase a la Serie Mundial con un jonrón de tres carreras en extrainning.
Seguramente al dominicano le gustaría quedarse, sobre todo si levantan el trofeo de campeones en el Clásico de Otoño, pero no está para sentimentalismos: está buscando un contrato de $600 millones con un equipo ganador y se irá con quien le haga la mejor oferta. Los Yankees tienen en los Mets a su rival más peligroso, pero no el único, en la persecución de la firma del outfielder.
El compromiso que está mostrando el veterano Anthony Rizzo al jugar con dos dedos fracturados en la mano derecha es elogiable, pero tal vez no baste para convencer a la gerencia de ejercer la opción de club para 2025 y vean al inicialista partir en la agencia libre.
Hay casos particulares, como los de Gleyber Torres y Alex Verdugo, Ambos llegaron a su último año de arbitraje, no se les ofreció una extensión y al menos hasta que comenzaron los playoffs se daba por sentado que se quedarían fuera del equipo durante el invierno.
Pero con sus actuaciones en la postemporada pueden hacer cambiar de opinión al alto mando y ganarse una oportunidad de seguir vistiendo el uniforme a rayas, igual que el relevista Luke Weaver, cuyo pacto tiene opción de club para 2025. Con Clay Holmes es difícil pronosticar la decisión, pero hay algo seguro: si regresa en la agencia libre no será como cerrador.
Jonathan Loáisiga y Lou Trivino no volverán, pero Tommy Kahnle puede tener una oportunidad. Otros cuatro jugadores de la plantilla neoyorquina (los relevistas Nick Burdi, Tim Hill, Phil Bickford y Tanner Tully) son elegibles para la agencia libre en el invierno y seguramente irán a otro lugar.
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