Mike Tyson está listo para su regreso. La controvertida leyenda del boxeo regresa al ring para pelear contra el YouTuber convertido en boxeador Jake Paul, de 27 años. Aunque Tyson tiene 58 años y no ha subido a un ring de boxeo profesional en años, se siente listo para el combate. Incluso ha emitido una advertencia a sus hijos.
“Bueno, la familia lo es todo”, dijo Tyson. “Para mis hijos no soy nadie, pero esa noche descubrirán que su padre es muy especial”.
“No quiero decir que me dan por sentado, pero me hablan muchas tonterías que nadie más diría”, continuó.
“Así que la noche de la pelea se darán cuenta de que tendrán que verla la próxima vez que me hablen tonterías”.
La dureza de Tyson sorprendió al entrevistador e incluso a él mismo. Cuando se le preguntó si quería enviarles un mensaje, se rió y dijo: “Los quiero mucho, no puedo esperar a verlos”.
La pelea de Mike Tyson y Jake Paul lleva meses preparándose. El encuentro finalmente llegará a buen término este 15 de noviembre en el AT&T Arlington Stadium de Texas y se transmitirá en vivo por Netflix.
La pelea estaba inicialmente programada para julio de este año, pero se pospuso debido a la salud de Tyson, quien informó un brote de una úlcera estomacal.
A pesar del legado y la historia de Tyson, el combate de boxeo tiene la mayor diferencia de edad entre los boxeadores profesionales en la historia del deporte. Hay 31 años entre los dos concursantes, razón por la cual Paul es el favorito para ganar en la mayoría de los sitios de apuestas.
Aún así, Tyson cree que está en gran forma y puede enfrentarse a Paul. En uno de sus entrenamientos en Dallas, dijo que su entrenamiento para este partido le ha enseñado lo duro que es. “Terminé el proceso y ahora la pelea es la fiesta. Todo el trabajo duro está hecho”, dijo.
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